Un reciente informe de LatinFocus Economics, basado en encuestas a más de 50 consultoras y bancos privados, tanto locales como internacionales, ofreció una visión sobre el futuro de la economía argentina. El consenso general apuntó a una inflación persistente, aunque moderándose lentamente, y a una desaceleración de la actividad económica.

El informe destacó que la inflación de agosto se situó en el 33,6%, la más baja desde julio de 2018. Los analistas esperan que esta tendencia a la baja continúe en los próximos trimestres, impulsada por el ajuste fiscal, una mayor competencia, menores restricciones a las importaciones y la estabilización de los precios internacionales de las materias primas. Sin embargo, advirtieron que la reciente depreciación del peso podría frenar este proceso.

Las proyecciones sitúan la inflación promedio en un 42,1% para 2025 y un 23,6% para 2026. El informe señaló un crecimiento del 0,9% en el primer trimestre del año, seguido de una ligera contracción del 0,1% en el segundo. Se observó una caída en el gasto privado, la inversión fija y las importaciones, compensada parcialmente por un mejor desempeño de las exportaciones y el consumo público.

Para el tercer trimestre, se anticipó una leve contracción. Analistas de Itaú Unibanco advirtieron sobre "riesgos significativos a la baja" para su proyección de crecimiento del PBI del 5,0% para 2025, debido a la debilidad de los indicadores líderes y el impacto de las altas tasas de interés.

Sergio Armella, de Goldman Sachs, coincidió en que la debilidad persistirá en el corto plazo, influenciada por las restricciones financieras, la incertidumbre política y un sentimiento generalizado más débil.

El tipo de cambio y la política monetaria

El informe subrayó la marcada depreciación del peso en el trimestre, exacerbada por los resultados electorales adversos y la consiguiente inquietud sobre las perspectivas del programa fiscal del presidente Milei.

En cuanto a la política monetaria, el informe señaló que las tasas de interés se dispararon desde junio, en respuesta a la pérdida de confianza en los activos del país.

Respecto al tipo de cambio, se destacó que el Banco Central permite la flotación del peso dentro de una banda. A principios de octubre, el tipo de cambio oficial se ubicaba en 1.424,7 por dólar.

Los analistas de Focus Economics estimaron que el peso continuará debilitándose, cerrando 2025 en 1.496,4 por dólar y 2026 en 1.736,4 por dólar.